Tejer en la tercera edad es una experiencia empoderante que reduce el estrés y contribuye a un envejecimiento activo. La concentración que propone el tejido lo convierte en un pasatiempo con muchos beneficios: no solo permite crear prendas y accesorios únicos, sino que además es una actividad que favorece el bienestar general.
La concentración que demanda tejer ayuda a estimular el cerebro, mantener la concentración y mejorar la memoria. Asimismo, tejer es una de las actividades más relajantes y calmantes que puede haber; casi como una meditación en movimiento. Por otra parte, mantener ocupadas las manos con el tejido puede ayudar a quebrar patrones poco saludables, como fumar o pasar demasiado tiempo frente a la pantalla del teléfono.
Por último y no menos importante, tejer ofrece gratas recompensas a quien lo hace, ya que permite crear regalos para seres queridos, lo que brinda una sensación de bienestar y completitud.
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Beneficios de tejer en la tercera edad:
El tejido es una actividad relajante con beneficios para personas de todas las edades, pero tejer en la tercera edad es mucho más beneficioso aún, ya que promueve el envejecimiento activo y contribuye a tener una mente más saludable y feliz. Uno de los mayores beneficios para la salud de tejer es su capacidad para lidiar con el estrés, la ansiedad y la depresión. En ese sentido, los efectos relajantes del tejido pueden ayudar a calmar y tranquilizar la mente.
Gracias a los movimientos rítmicos y necesidad de enfoque que propone tejer, es posible combatir la dispersión y brindar un sentido de propósito, ambos aliados del envejecimiento activo. Por otra parte, tejer ayuda a utilizar el cerebro con la atención, poniendo a prueba la memoria y la velocidad de procesamiento. Está científicamente comprobado que tejer mantiene el cerebro estimulado y saludable.
Otra ventaja de tejer es la posibilidad de hacerlo en un entorno social y así promover las conexiones sociales y reducir la soledad y el aislamiento. Asimismo, cuando tenemos las manos ocupadas en una actividad creativa, tenemos menos posibilidades de comer sin control, o caer en el vicio del celular. Así, tejer puede romper con patrones poco saludables y es una excelente manera de entretenimiento, todos factores que contribuyen a un envejecimiento activo.
Por último, tejer puede ser una experiencia gratificante, ya que al crear piezas únicas se puede disfrutar el placer de regalar a otros. Ofrecer tu tiempo y habilidades para hacer algo por un ser querido, como por ejemplo los nietos, brinda una sensación de bienestar y te hace sentir bien.
Tejer en la tercera edad: tipos de tejidos
En el fascinante mundo de la creación textil, existe un universo diverso de técnicas de tejido, cada uno con su propia complejidad y encanto. Desde el clásico tejido a dos agujas hasta la delicadeza del crochet, pasando por la técnica del macramé y el emblemático telar. Aunque varían en sus herramientas y métodos, todos comparten un propósito común: transformar las fibras en obras maestras tejidas. Repasemos las distintas opciones existentes para adentrarse en el mundo del tejido.
Tejido a dos agujas (o punto):
Esta tal vez sea la forma más popular de tejido. Se realiza con dos agujas y se utilizan para crear prendas de punto como suéteres, bufandas y mantas. Hay una variedad de puntos y técnicas para crear diferentes patrones y texturas.
Crochet:
Se realiza con una única aguja de gancho y por lo general se utiliza para crear tejidos más densos y con detalles. El crochet es versátil y se puede utilizar para hacer prendas, accesorios y hasta elementos decorativos.
Macramé:
Se trata de una técnica de tejido que utiliza nudos en lugar de agujas o ganchos. Es comúnmente usado para hacer decoraciones, como cortinas, accesorios como pulseras y collares, y otros proyectos de diseño textil.
Telar:
El telar es un elemento histórico, de gran tradición e historia. Se trata de una máquina, de madera o metal, que permite crear tejidos de manera rápida y eficiente. Si bien interesante, es una opción más compleja, ya que para poder utilizarlo es necesario contar con un telar o acudir a algún lugar especial para usarlo.
Tejer una vida plena en todas las etapas, el gran desafío
Así como con los hilos y la lana, tejemos cada día de nuestras vidas. Cada puntada es significativa, y así como esta actividad ayuda a promover un envejecimiento activo, cuidar del bienestar no solo abarca la vida, sino también la etapa final. Por eso, el seguro de sepelio de «A Mi Manera» surge como una opción valiosa a considerar. Porque proteger tu tranquilidad y la de tus seres queridos es parte integral de vivir plenamente en todas las etapas, dejar resuelto y saber que al momento de partir, alguien más se encargará de los detalles.
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