El uso de los billetes pronto será cosa del pasado. Y el de las tarjetas, también. Pagar mediante una aplicación del teléfono es cada vez más común.
La revolución digital que tuvo lugar a partir de la pandemia no se limita al continuo uso de Zoom o al aumento de compras online. Uno de los cambios de hábitos que nos vimos forzados a adoptar desde que surgió el covid tiene que ver con el manejo diario del dinero. Al igual que las aplicaciones de teleconferencia, los sistemas de pago digital ya existían, pero tuvieron un despegue enorme a partir de la pandemia.
Desde hace unos años ya, el uso de las tarjetas de débito redujo la circulación de billetes. Ahora vemos que mucha gente directamente paga con el teléfono. Parece muy conveniente, pero nos entran dudas: ¿Es confiable? ¿Es gratuito? ¿Es fácil de usar?
La respuesta más sencilla a todas estas preguntas es un claro “SÍ” a todo.
Estas aplicaciones, conocidas como billeteras electrónicas o digitales, son totalmente gratuitas, muy sencillas de usar y tan confiables como la tarjeta de débito o el efectivo. Con el valor agregado de que, al no tener que sacar la billetera física (ni siquiera es necesario llevarla encima), no nos exponemos al riesgo de perder billetes o documentos, o sufrir la desagradable experiencia de un arrebato.
MERCADO PAGO Y MODO
Existen muchas aplicaciones para el teléfono que permiten pagar –ya sea con crédito, o con débito de una cuenta–, pero hay dos principales: Mercado Pago y MODO. La primera existe desde 2003 para realizar pagos en compras por Internet. En 2019 incorporó el pago con QR, un código identificador que permite hacer pagos con el teléfono en comercios, como el supermercado. MODO es un sistema similar, lanzado en conjunto por 33 bancos del país, que se inauguró a fines de 2020 para competir con Mercado Pago.
El uso del sistema es muy sencillo. Luego de descargar la aplicación hay que realizar la validación del usuario, sacando fotos del DNI y de la cara del usuario. Por último, se puede asociar una tarjeta de crédito o de débito a la aplicación, y ¡ya está! En la siguiente compra solo hay que abrir la aplicación, presionar el botón “Código QR” y enfocarlo en el que nos ofrece el cajero del comercio. Eso es todo. Para nosotros, es lo mismo que si pagáramos con tarjeta (de débito o de crédito).
MODO tiene la ventaja de que, si tenemos la aplicación de nuestro banco en el teléfono, se activa directamente desde la app del banco, sin necesidad de instalarla de forma independiente. Sin embargo, Mercado Pago, que está disponible desde hace más tiempo, está mucho más extendido y funciona de forma muy aceitada, en tanto que numerosos usuarios han reportado problemas con MODO.
OTROS BENEFICIOS de la Billetera Electrónica
Las billeteras electrónicas permiten realizar, además, muchos otros tipos de transacciones financieras: desde transferencias de dinero a pagos de servicios, recargas de celulares o tarjeta SUBE, por ejemplo. Permiten incluso enviar o recibir dinero a los contactos del teléfono por WhatsApp o mail, de manera más sencilla que mediante las apps bancarias.
El mercado ha explotado en el último año: además de estas dos, están Ualá, Naranja X, Valepei y apps de bancos públicos, como Cuenta DNI (Banco Provincia) y BNA+ (Banco Nación).
De cualquier manera, lo que está claro es que el uso “virtual” del dinero llegó para quedarse, de forma que cuanto antes lo incorporemos, mejor. Y el primer paso para eso es perder el miedo a la novedad. Su uso no exige mayores conocimientos del mundo digital que los que ya tenemos cuando usamos un teléfono. Tampoco debemos preocuparnos por que podamos perder todo nuestro dinero accidentalmente, o que nos roben dinero de la cuenta si extraviamos el teléfono: la posibilidad de equivocarnos al ingresar un monto que debemos pagar es la misma que existe de confundirnos un billete de $1.000 con uno de $20, solo hay que prestar un poco de atención. Por otra parte, las billeteras virtuales están protegidas por contraseñas, de modo que no se puede acceder a ellas solo por el hecho de tener el teléfono.
Es cuestión de animarse y pensar que las billeteras electrónicas son una herramienta que nos hace la vida más fácil, aunque lleve un poquito de esfuerzo aprender a usarlas. En todo caso, debemos mirarlo de esta manera: es una forma de mantenernos activos, saliendo de esa zona de confort que muchas veces es menos confortable de lo que parece a primera vista.
